sábado, 23 de mayo de 2015

La puerta de Tannhäuser

Tengo muchísimos recuerdos de Linda, cazando becadas en sitios buenos, de gran densidad de becadas, y otros no tan buenos, donde realmente el hecho de tener un gran perro marca la diferencia. Las muestras, guías y cobros perfectos de Linda son esos recuerdos que uno se lleva consigo. Como decía el Nexus 4 al final de la inolvidable Blade Runner:

"Yo he visto cosas que vosotros no creeríais: Atacar naves en llamas más allá de Orión. He visto Rayos-C brillar en la oscuridad cerca de la puerta de Tannhäuser. Todos esos momentos se perderán en el tiempo... como lágrimas en la lluvia"

Los momentos que yo viví con Linda también se perderán en el tiempo. Espero que al menos estas fotos sirvan para que perduren un poco más...




















2 comentarios:

  1. Que buenos recuerdos, perros que lo han dado todo en el monte, nos han llenado de satisfacción y dejan huella para siempre.
    Está guapo el blog, te deseo una temporada con múltiples lances para que los compartas con nosotros.
    Saludos
    Armando

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    1. Lo mismo te deseo. Que tengamos una muy buena temporada. Y que disfrutes del tiempo que le queda a ese perro veterano tuyo. Yo las últimas becadas de mi vieja Linda (murió hace un par de años) las disfruté tanto, o tal vez más que las primeras que les cacé a los jóvenes.
      Un saludo.

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